5 cosas que debes saber sobre la biometría

Hay diferentes formas de validar la identidad de un cliente, por ejemplo, cuando llamamos a una entidad, ya sea privada o pública, nos piden el número de identificación o nos formulan unas preguntas de seguridad para comprobar que somos quienes decimos ser.

Otro mecanismo muy popular es el de las contraseñas; toda plataforma tecnológica las utiliza. Existen también otros mecanismos más sofisticados que combinan las preguntas y las contraseñas. Sin embargo, todas esas técnicas tradicionales para identificar al cliente tienen un alto grado de riesgo y son muy vulnerables. 

La biometría, por el contrario, es una técnica que permite una identificación con un grado de certeza más alto y con unos riesgos menores tanto para la persona que se identifica como para la organización con la que se interactúa. Por eso, es importante que las empresas empiecen a complementar las antiguas formas de validación con maneras más eficaces y seguras como la biometría.

En este artículo les contaré 5 claves para entender de qué se trata este tipo de tecnología y comprender los retos a los que nos enfrentamos al implementarla. 

5 claves sobre la Biometría 

1. Beneficios de la biometría

La biometría forma parte de la gestión de la identidad digital de las personas, lo que es fundamental a la hora de ofrecer servicios personalizados en entornos digitales. Sin la identidad del cliente no es posible ofrecer servicios digitales personalizados que impacten en la vida de las personas.

Si las organizaciones no son capaces de identificar a los usuarios, cualquier servicio o valor agregado quedará sujeto a fallas. En definitiva, la gestión de identidad digital es el fundamento de todos los procesos digitales, y la biometría es una parte esencial para facilitar ese proceso. 

En ese sentido, el beneficio más potente que la biometría le ofrece a cualquier empresa es facilitarles la vida a los usuarios, hacer que las operaciones que pasan por la identificación de la persona sean lo más rápidas y eficientes, y que impliquen el menor riesgo posible. Por supuesto que hay otras ventajas, como garantizar la seguridad o minimizar el riesgo de que una institución financiera sea víctima de fraude.  

2. Los tipos de biometría

La biometría se divide en dos grandes categorías: la biometría de rasgos físicos o fisiológicos, y la biometría de rasgos comportamentales o conductuales.

Voy a poner un ejemplo de la vida real. Yo identificaba a mi papá en la noche por la forma en que caminaba. Nadie caminaba como caminaba mi papá. Esa forma de caminar que él tenía es una característica conductual, comportamental.

Por el contrario, los rasgos fisiológicos son aquellos inherentes a las personas en cuanto seres humanos, como la huella dactilar, el rostro, el iris, la palma de la mano: ese tipo de mecanismos de identificación biométricos corresponden a la categoría de fisiológicos. 

Sin embargo, hay rasgos que son a la vez fisiológicos y conductuales, como la voz. Las personas no hablan de la misma manera en todo momento. Hay variaciones de la onda de la voz según diferentes criterios: la altura, los cambios en la presión, los cambios barométricos, por afonía o disfonía. Todo eso altera la voz. 

Otros tipos conductuales que surgieron en la era digital son la digitación, la velocidad en la que se presionan las teclas para escribir algo o la forma en la que se mueve el mouse para seleccionar una opción en una pantalla. Todos esos comportamientos se pueden trackear. Por ejemplo, la manera en la que yo escribo “casa” es diferente a la de otra persona. Si bien eso no da una certeza sobre mi identidad, todos esos rasgos en conjunto aglutinan patrones de identificación.

La tecnología no está para garantizar que una persona sea la que dice ser, sino que nos va a ayudar a identificarla con un porcentaje alto de exactitud. Por eso, dentro de la gestión de la identidad, varios factores juntos ayudan a reconocer a un usuario con mayor probabilidad. 

3. La biometría en Colombia

En Colombia, la biometría ya ha penetrado tanto en organizaciones como en procesos de empresas públicas y privadas. Aunque tenemos algunas áreas en las que hay un desarrollo más avanzado, aún hay muchas tareas pendientes por hacer en cuanto a técnicas y dominio de conocimiento sobre el tema.

En el sector público colombiano, la biometría está impulsada por iniciativas gubernamentales para identificar a los ciudadanos. Esta responsabilidad constitucionalmente recae en la Registraduría Nacional del Estado Civil, que desde hace varios años empezó a incorporar soluciones biométricas en sus diferentes planes de modernización.

Del mismo modo lo han hecho algunas organizaciones del sector financiero para disminuir el fraude y mejorar sus procesos de gestión de riesgo.

Por último, un aspecto que no es menor es la aplicación biométrica en la seguridad física de instalaciones. Cada vez es más común ver oficinas, edificios, bodegas, comercios o centros de negocios donde la identificación biométrica se usa para permitir o negar el acceso a determinadas zonas. 

4. ¿Y qué hay de la seguridad de los datos biométricos?

Técnicamente existen formas de suplantación de datos biométricos fisiológicos, pero para hacer esa alteración hay que replicar de alguna manera ese elemento físico, lo cual es muy complicado de hacer.

Hoy en día las plataformas de gestión de identidades, los  proveedores de esos servicios biométricos, están en una constante innovación para detectar vectores de fraude y no permitir que ese tipo de cosas pasen. Entonces, aunque es técnicamente posible, la probabilidad es muy baja.

Asimismo, el riesgo es mucho más bajo que otras técnicas, como las contraseñas o las preguntas de validación. Además, en Colombia la Ley de Habeas Data cobija la protección de estos datos, que son confidenciales y no pueden usarse para otra cosa so pena de cometer un delito.

5. La estandarización, una asignatura pendiente

Algunas ventajas de la biometría ya las hemos mencionado anteriormente. ¿Pero qué hay de las desventajas? 

En este momento, apenas se está pensando en una estandarización de los procesos. Los diferentes proveedores utilizan distintos mecanismos para garantizarlos a nivel tecnológico, pero la interoperabilidad aún no es tan frecuente. Si una empresa implementa una solución biométrica con un proveedor y quiere cambiarse a otro, hoy en día el proceso es muy complicado.

Sin embargo, hay iniciativas de interoperabilidad en el ámbito tecnológico. Por ejemplo, la alianza FIDO (Fast Identity Online) permite evaluar la seguridad y la interoperabilidad de una solución de autenticación a través de ciertos requisitos. Con esa certificación comenzamos a madurar como industria, como sector, lo cual beneficia a todos los involucrados.